En una sartén amplia con un chorro de aceite de oliva virgen y a fuego medio, pochamos 600 g de puerros limpios y cortados en rodajitas finas y 1 cebolla en juliana. Salpimentamos.
A los 20 minutos aproximadamente añadimos 12 gambones de los gordos pelados, sin cabeza y sin trocearlos. Dependerá del tamaño del gambón, langostino...las unidades por persona. En este caso con 3 por ración es suficiente.. Los salteamos un minuto e incorporamos, ya con la sartén fuera del fuego, 1 huevo batido con 1 vasito de leche. Removemos todo y reservamos.
Mientras se pocha el puerro y la cebolla, vamos a hacer una especie de salsa americana:
En una sartén mediana con un chorrito de aceite y a fuego medio, pochamos 1/2 cebolla y 1/2 pimiento verde, todo cortado en daditos pequeños, junto con 1 cayena. Salamos.
Pasado un tiempo, la verdura estará pochada. Sacamos la cayena de la sartén e incorporamos 1 cucharada de harina. Dejamos que se cocine un minuto y añadimos 1 vasito de coñac, las cabezas y cascaras de los gambones y agua hasta que cubra todo.
Dejamos cocer a fuego medio unos 30 minutos, trituramos todo (incluidas las cabezas y cascaras) y pasamos por un chino o colador de malla no muy gorda.
Nos deberá quedar una salsa tirando a espesita. Si no lo está, la tendremos que poner a cocer en una sartén unos minutos hasta que espese un poco.
También tenemos que cocer unas láminas de pasta para lasaña. Yo os recomiendo para este plato las que no son precocidas, ya que estas necesitan luego más horno del que nosotros le vamos a dar:
Ponemos agua abundante en una cazuela grande y cuando hierva añadimos sal.
Introducimos 2 láminas de pasta por persona y cocemos el tiempo que indique el fabricante.
Las sacamos con cuidado con la ayuda de una rasera y las introducimos en una fuente con agua fría 1 minuto.
Después las colocamos en un trapo de cocina limpio para que se sequen.
Ya podemos empezar a montar nuestra lasaña en el plato de presentación (si aguanta bien el calor del horno) o en una bandeja ligeramente engrasada:
Colocamos una lámina de pasta en el plato o bandeja, encima una buena capa de puerro-cebolla y 3 gambones bien colocaditos. Otra lámina de pasta y terminamos cubriendo el conjunto con la salsa.
Introducimos el plato o la bandeja en el horno precalentado a 230º, en gratinador, unos minutos hasta que se dore ligeramente la salsa.
Si hemos usado un plato, recordad que hay que avisar al comensal de que está caliente.
Si nos hemos decidido por usar una bandeja, solo quedará emplatar con ayuda de una espátula y comer rapidito antes de que se enfríe.
La combinación de puerros y marisco me parece tan delicada....
ResponderEliminarRiquisima
Que buena pintaaaaaaaaaaaaa
ResponderEliminarSi, yo también pienso que es una buena combinación. Hay que tener cuidado de que la salsa no quede muy fuerte para que el sabor de puerro no se pierda, por lo demás.....muy rica!!
ResponderEliminarAh! Y muchas gracias a las dos, por supuesto!! XD
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